Treinta años de asistencia técnica de la OMC para promover la participación en el comercio mundial
Desde su establecimiento en 1995, la OMC ha apoyado la participación de las economías en desarrollo y los países menos adelantados (PMA) en el sistema multilateral de comercio mediante la prestación de asistencia técnica, ayudando a los beneficiarios a desarrollar su capacidad de aprovechar plenamente el comercio mundial. En los últimos 30 años, más de 320.000 funcionarios públicos se han beneficiado de esta asistencia.
La asistencia t閏nica de la OMC es una función fundamental de la Organización y ha evolucionado constantemente para satisfacer las nuevas necesidades de los beneficiarios y un entorno mundial cambiante, prestando creciente atención al logro de resultados que puedan medirse.
Desglose regional de las actividades
Desde 1995, la OMC ha realizado más de 10.000 actividades de asistencia técnica para sus Miembros y observadores que reúnen las condiciones necesarias. En los tres años siguientes al establecimiento de la Organización, estas actividades se llevaron a cabo a nivel mundial, sin centrarse en regiones concretas. Sin embargo, a partir de 1998, la atención empezó a centrarse en atender las necesidades específicas de los distintos Miembros, a nivel regional o nacional.
África ha recibido sistemáticamente la mayor parte de la asistencia técnica y da cuenta, en promedio, de alrededor del 30% de las actividades anuales, una proporción que ascendió al 40% entre 2005 y 2011 (véase el gráfico 1). La región de Asia y el Pacífico se ha beneficiado de aproximadamente el 20% de las actividades. Oriente Medio, el Caribe, y Europa Central y Oriental y Asia Central han recibido, respectivamente, entre el 5% y el 10% de la asistencia anual. América Latina también ha ocupado un lugar destacado en los programas de asistencia técnica y ha sido destinataria, en promedio, del orden del 10% de las actividades.

Creación de asistencia técnica en línea
La puesta en marcha en 2004 de la plataforma e-learning de asistencia t閏nica de la OMC, que se actualizó en 2022, fue un punto de inflexión para prestar asistencia en forma más accesible e impartir formación de un modo más eficaz en función de los costos. La plataforma adquirió más importancia durante la pandemia de COVID-19, cuando las restricciones a los viajes impidieron realizar actividades presenciales.
Desde 1995, más de 110.000 funcionarios públicos han recibido formación a través de la plataforma e-Learning, cifra que representa más de un tercio del número total de beneficiarios (véase el gráfico 2). El número anual de participantes en la plataforma e-learning ha superado al de beneficiarios de las actividades presenciales realizadas desde 2014. En forma más reciente, se está introduciendo, gradualmente, un nuevo enfoque que combina las actividades de e-learning, las presenciales y las virtuales.

La asistencia técnica de la OMC está destinada principalmente a funcionarios públicos, pero su alcance se hace extensivo a otros grupos fundamentales, incluida la comunidad académica, a través del Programa de Cátedras OMC, así como los parlamentarios, los periodistas, el sector privado y las organizaciones no gubernamentales.
Evolución de los enfoques pedagógicos
En 2010 se introdujo una estrategia de aprendizaje progresivo con el fin de mejorar la utilización eficiente de los recursos para la prestación de asistencia técnica, centrada en promover progresivamente las aptitudes de los participantes. Esta estrategia de aprendizaje progresivo estructura las actividades de asistencia técnica en torno a tres niveles de aprendizaje — introductorio, intermedio y avanzado — y dos vías de formación — para generalistas y para especialistas — con el objetivo de crear capacidad para los beneficiarios de manera sostenible y acumulativa.
Los métodos de formación utilizados en la ejecución de los programas de asistencia técnica también han evolucionado con el tiempo. Mientras que el enfoque adoptado en 1995 se basaba predominantemente en las conferencias, la proporción de estas en el tiempo total de formación se ha reducido en cierta medida desde 2013 en favor de las actividades presenciales que incorporan sesiones más prácticas y técnicas pedagógicas interactivas (véase el gráfico 3). En los últimos años se han introducido la mentoría y el coaching.

Además de los programas de formación, en 1998 se puso en marcha el primer programa de pasantías. Desde entonces se han establecido otros cuatro programas similares. Estas oportunidades de realizar pasantías han beneficiado colectivamente a más de 800 participantes de más de 100 Miembros y observadores de la OMC.
Prioridades de asistencia técnica
Las actividades de asistencia técnica de la OMC se rigen por planes bienales que establecen prioridades y estrategias para garantizar la satisfacción efectiva de las necesidades de los beneficiarios. En 2013 se aplicó un enfoque de gestión basada en los resultados para mejorar la vigilancia de todas las actividades de asistencia técnica de la OMC, desde la planificación hasta la evaluación. El objetivo del enfoque es obtener resultados específicos y mensurables para mejorar la capacidad de los beneficiarios de participar en el sistema multilateral de comercio.
Desde su introducción, la proporción de objetivos de asistencia técnica total o parcialmente cumplidos, como la conclusión satisfactoria de los cursos, ascendió al 91% en 2018. Esta cifra disminuyó entre 2020 y 2022 debido a la repercusión de la pandemia de COVID-19 en la prestación de asistencia técnica, pero volvió a aumentar en 2023 (véase el gráfico 4).

Negociaciones de la OMC y aplicación de sus Acuerdos: algunos resultados mensurables
La asistencia técnica ha contribuido a mejorar la capacidad de los Miembros y observadores de la OMC en desarrollo y, en particular, de los PMA, para participar eficazmente en las negociaciones de la OMC y colaborar con la labor de los órganos de la OMC. También ha sido esencial para las economías que desean incorporarse a la OMC a medida que avanzan en sus procesos de adhesión.
En el caso de varios acuerdos recientes negociados en la OMC (por ejemplo, sobre facilitación del comercio, subvenciones a la pesca y facilitación de las inversiones para el desarrollo), las disposiciones relativas a la asistencia técnica para los países en desarrollo y los PMA Miembros han sido fundamentales para concluir las negociaciones. En los últimos 10 años, miles de funcionarios públicos se han beneficiado de programas de formación realizados en el marco de actividades de asistencia técnica destinados a reforzar su capacidad para cumplir las obligaciones dimanantes de los Acuerdos de la OMC y beneficiarse plenamente de estos Acuerdos (véase el gráfico 5).
Los temas abarcados por los programas de formación en el marco de la asistencia técnica han seguido evolucionando a lo largo de los años, en consonancia con las prioridades definidas por los beneficiarios. Esta flexibilidad permite que la asistencia técnica de la OMC tenga en cuenta la evolución de las cuestiones relativas al programa de la Organización, como el comercio digital, la economía verde y el comercio inclusivo.

La repercusión de estos esfuerzos puede medirse de diferentes maneras. Por ejemplo, la asistencia técnica de la OMC ha abierto camino, con gran esfuerzo, en la esfera de la creación de capacidad para estimular un aumento sostenido del número de propuestas u otros documentos que abarcan diversos temas objeto de negociación o debate presentados a los órganos de la OMC por los beneficiarios de dicha asistencia. Estas contribuciones han sido inestimables para que las deliberaciones comerciales y la adopción de decisiones sean más inclusivas.
El fortalecimiento de la capacidad de los beneficiarios de la asistencia técnica para cumplir sus obligaciones en materia de transparencia en el marco de diversos Acuerdos de la OMC, incluso mediante la notificación de nuevas medidas comerciales, figura entre los objetivos de desempeño de la actividad de asistencia técnica de la OMC. Dado que el volumen global de las obligaciones de notificación ha aumentado cada año, la labor de asistencia técnica ha permitido a los beneficiarios no solo mantenerse a la altura de sus nuevas obligaciones de notificación, sino incluso reducir progresivamente el número de sus notificaciones pendientes.
Compromisos financieros en materia de asistencia técnica de la OMC
La asistencia técnica de la OMC se financia tanto mediante el presupuesto ordinario de la Secretaría de la OMC, como de contribuciones voluntarias de los Miembros de la Organización a fondos fiduciarios. Desde 1995 se han destinado un total de más de CHF 500 millones a estas actividades. Las contribuciones del presupuesto ordinario alcanzaron sus niveles más altos entre 2002 y 2013 y han permanecido en un nivel de CHF 4,5 millones desde entonces. Mientras tanto, las contribuciones voluntarias de los Miembros han disminuido constantemente, pasando de CHF 23 millones, en promedio, entre 2007 y 2009 a CHF 6,3 millones en 2023 (véase el gráfico 6).
La financiación sostenida sigue siendo esencial para responder eficazmente a las necesidades cambiantes de los Miembros y asegurar la asistencia técnica necesaria para un sistema multilateral de comercio de carácter inclusivo.
